sábado, 22 de junio de 2013

Las estrellas me contemplan desde un infinito oscuro y vacío. Son solo ellas y yo en una charla sin palabras. Hasta que la cruda realidad me despierta y solo hay confusión y temor... de saber quien soy... de elegir algo incorrecto... o de tan solo despertar.
Las soledad nunca es buena. Pero hay casos remotos, en donde todo y todos te caen mal y es preferible encontrarse en el medio de la nada con un cuestionario y una charla imaginaria: ¿Qué hacer? ¿Cómo reaccionar? ¿Cómo bancarte tanta tristeza? ¿tanto desconocimiento?
El viento frío sopla sobre mi piel, pero me gusta. Me encanta saber que nadie me esta viendo ni siquiera para decirme que me abrigue. Porque el frío tal vez no están malo como creí que era. En momentos como este es una compañía que no molesta con sus palabra o miradas. Es un amigo que abraza y consuela.
Pero en ocasiones así nadie me ayuda a pensar, ni comprender. Y solo las estrellas que lucen tan plateadas y solas esperando que alguien las valore, me entienden. A pesar de que sus palabras se dan en silencio, sus corazón están allí para brindar una especie de ayuda.
   Ayudarme a entender algo, que es incomprensible.
                   Ayudarme a pensar algo, que no tiene solución.
                                           Porque son mis sentimientos... y ni siquiera yo los entiendo.
stars | via Tumblr

1 comentario:

  1. Dios!!! PERFECTA entrada Anabella, que emocionante... me ha encantado.
    Por cierto, MUCHAS GRACIAS por el comentario en mi blog, de verdaaad! :)
    Muchis besos
    Aresss

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